Con el pasar de los años y además el mal cuidado, algunos objetos de metal se comienzan a oxidar, y esto arruina su aspecto exterior y también su utilidad.
El óxido:
Con el uso a diario, o el pasar de los años, el óxido comienza a invadir ciertas piezas de metal, e incluso cubrirlas totalmente. Esto puede arruinar totalmente la pieza si no hacemos algo al respecto. Después de haber quitado el óxido, es muy importante guardar y mantener la pieza para que no vuelva aparecer. Eliminar el óxido de una pieza de metal, no es para nada difícil. Existen varias soluciones y todas tienen buenos resultados. Lo que se recomienda es evaluar cada una, y aplicar aquella que mejor se adapte a nuestra necesidad. Consejos e ideas para eliminar el óxido de los metales:
- Una de las más clásicas, y tal vez la más barata y rápida, es colocar la parte que está oxidada en coca-cola y luego limpiar dicha parte.
- Otra puede ser, sumergir dicha parte en carbonato de potasa, dejarlo en remojo un largo tiempo y después limpiar frotando bien fuerte.
- También se pueden usar productos desoxidantes que se encuentran en las ferreterías o pinturerías grandes. Estos, tienen listado de instrucciones que se deben seguir para un resultado correcto. Habitualmente, lo que se pide es lavar bien la parte con jabón y agua, después se le echa jabón y por último se limpia igual que a una olla. A continuación se aplica el desoxidante comprado con una servilleta de papel y de apoco el oxido se irá yendo. Para un mejor acabado, se puede colocar un abrillantador.